En el barrio 21 – 24 inició + Miradas, una capacitación pensada para impulsar vocaciones periodísticas en barrios populares. En la primera clase las y los 20 participantes compartieron sus sueños, anhelos y expectativas.
* Por Juan Pablo Martínez
Un puente. Eso es + Miradas. Un adorable puente entre FOPEA y 20 jóvenes que intentan dar sus primeros pasos en el periodismo, fortalecer sus carreras. Un puente para conocer sus realidades, para potenciarlos, para acercarlos al ecosistema de medios, para abrir un espacio de oportunidades.
El frío es omnipresente en una Buenos Aires que todavía no se anima a despertar del todo. Son las 8 del sábado 23 de junio y ni la calle Corrientes se puede sacar la modorra de encima. Majo Müller, la coordinadora de este proyecto, ya está activa desde hace rato junto con Fer y Celi, sus compañeros en este desafío.
En el barrio 21- 24, en la escuela Caacupé, ellos ponen a punto los últimos detalles para recibir a los 20 seleccionados que participarán de esta capacitación que durará 12 sábados y que busca impulsar vocaciones periodísticas en barrios populares y que se realiza con el apoyo de Google News Initiative.
A esa hora, el barrio ya está activo pese a ser un sábado. Motos y autos van y vienen por la calle Osvaldo Cruz, donde está la escuela. Ya a esa hora es difícil encontrar un espacio libre para estacionar, se ven a muchos vecinos que entran y salen de los pasillos y en la parroquia Virgen de Caacupé unas 30 personas se organizan para las actividades del día.
“Ni un pibe menos” reza un grafiti pintado en la pared de la escuela. A pocos metros las ermitas con imágenes de santos y vírgenes se replican una tras otra. Cerca de las 9 Fer sale del aula, donde ya dejó todo listo para la clase, para esperar a los chicos en una esquina y poder guiarlos hasta la escuela.
En simultáneo Majo llega con unas medialunas y prepara una mesa en una esquina del aula para que cada estudiante tenga un desayuno calentito durante la clase. En cada uno de los 20 bancos del aula hay una mochila azul que adentro tiene un vaso térmico y un cuaderno con el logo de + Miradas. Es el regalo de bienvenida.
Tiempo de + Miradas, de conocerse
A las 9 en punto este proyecto comienza a cobrar vida. La puerta de chapa, también pintada de celeste, se abre y con sonrisas, miradas curiosas y un poco de timidez entran los 20 seleccionados para este proyecto: Alan (28), Alejandra (20), Analía (27), Ángel (23), Aracelly (19), Dalma (26), Darwin (28), Fernando (21), Guido (33), Gustavo (24), Gustavo (23), Karen (19), Katherine (20), Marcos (21), María Claudia (34), Milagros (25), Nancy (18), Patricia (22), William (27) y Yasmine (30).
Rápidamente todos se acomodan en sus bancos y reciben su regalo de bienvenida. En el ambiente sopla un suave murmullo, a veces interrumpido por el silencio de la expectativa. Hay que romper el hielo y todo está preparado para eso: hay un simulacro de radio abierta para que las y los alumnos se presenten.
Majo, Fer y Celi toman la palabra. Se presentan y cuentan sus historias. Explican de qué se trata + Miradas y todos aplauden. Con el ambiente más relajado es momento de las presentaciones del grupo.
En media hora conoceremos las historias de cada estudiante. De qué barrios vienen, qué carreras están cursando o han cursado, cuáles son sus expectativas y sus anhelos.
Es en este momento de presentaciones, de conocerse y acercarse que suena en la radio abierta Puente de Gustavo Cerati, y es como si cada uno de los presentes, incluído el azaroso reproductor de Spotify, entendieran que es un instante (y un proyecto) de conexión genuina y humana.
Los y las participantes de + Miradas también van a ir contando en la radio abierta que tienen un propósito firme: informar a las comunidades a las que pertenecen, informar sin prejuicios o estigmatizaciones, las que aseguran ven en los medios cada vez que sus barrios se convierten en el epicentro de algún suceso.
Para el momento del desayuno ya no queda timidez. Los chicos y chicas que participan de + Miradas dialogan unos con otros con ansias de conocerse, intercambian experiencias profesionales y personales.
¿Cómo dar los primeros pasos en el periodismo?
Para la segunda parte del encuentro llega Juan Carlos Simo (editor general digital de Todo Noticias), quien está a cargo de la primera clase. Para despabilar más a su audiencia pide aplausos y la clase comienza.
No es una charla en la que va a demostrar cómo trabaja y se organiza una gran redacción. La clase de Juan va a ser sobre el propósito del periodismo, una invitación a que cada uno pueda expresar por qué quiere ser periodista.
Simo también aconseja a quienes participan de + Miradas cómo tejer redes de contacto, cómo preparar perfiles para una búsqueda laboral y cómo aprender sobre este oficio haciendo, más allá de las posibilidades de poder capacitarse.
El obsequio más preciado de esta primera clase de + Miradas es un audio de WhatsApp que cada participante envió al grupo del proyecto. La consigna fue que ese audio contenga lo que moviliza a cada uno a ser periodista. Ese registro servirá como un recordatorio cada vez que el camino profesional avance o se complique.
+ Miradas tiene la misión de ser un proyecto cercano y humano, de contacto. Más allá de cualquier título es un puente que empezamos a cruzar para transformar realidades.