By Por segunda vez en 10 días, un equipo periodístico del programa 6, 7, 8, que se emite por Canal 7 Televisión Pública, fue atacado por manifestantes no identificados, que los golpearon e insultaron, al tiempo que lanzaban consignas en contra del Gobierno nacional. La primera agresión tuvo lugar el 22 de mayo, en una marcha realizada frente al Palacio de Tribunales, y la segunda ocurrió anoche, viernes 1 de junio, durante una protesta de vecinos contra medidas económicas en el cruce de las avenidas Callao y Santa Fe, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Las víctimas en los dos casos fueron el periodista Lucas Martínez, el camarógrafo Sergio Loguzzo y el productor Ezequiel Schneider, quienes cumplían tareas de cobertura profesional.
El Foro de Periodismo Argentino (FOPEA) se solidariza otra vez con los agredidos, tal como hizo en el episodio anterior, y reclama de manera insistente que se preserve la paz social por encima de cualquier ideología política y que se respete el trabajo periodístico, pues su labor social no puede estar atada a las posturas de ningún sector de la sociedad. La violencia nunca puede ser justificada, provenga de donde provenga. FOPEA también reclama a los dirigentes que convocan a las manifestaciones a resguardar a los periodistas, y apela a las autoridades responsables a aclarar los hechos, identificar a los agresores y ofrecer a la prensa las garantías mínimas para realizar su tarea sin correr riesgos.
Los hechos
El episodio ocurrido en la noche de ayer, en un denominado “cacerolazo” contra recientes medidas adoptadas por el Poder Ejecutivo Nacional, incluyó un violento ataque con golpes de puño y patadas al equipo periodístico del programa 6, 7, 8.
El productor Ezequiel Schneider relató lo ocurrido a Fopea: “En los primeros 25 minutos (de la cobertura periodística) se pudo entrevistar a varias personas, hasta que en un momento comenzaron las agresiones verbales de un grupo de manifestantes que nos gritaban que nos fuéramos. Enseguida lo empujaron a Sergio, quien se cae al piso junto con su cámara. En ese golpe se rompe la luz del equipo, y también pierde los auriculares. Intentó levantarse rápido para recuperar la cámara, pero en ese momento un hombre lo empujó, Sergio volvió a caerse y un grupo de personas comenzó a golpearlo contra una pared”. En ese momento, Schneider se tiró sobre su compañero para protegerlo de los golpes y un grupo de jóvenes manifestantes trataron de hacer una barrera para cubrirlos, según relató a Fopea.
Finalmente, los agredidos se pudieron retirar del lugar, mientras eran seguidos por algunos de los manifestantes. Dos oficiales de la Policía Federal los acompañaron hasta la Comisaría 17, donde los integrantes del equipo periodístico radicaron la denuncia por agresiones. Hasta allí se acercó un grupo de manifestantes, que los siguieron insultando. En la dependencia policial, el camarógrafo Sergio Loguzzo fue atendido por personal del Sistema de Atención Médica de Emergencia (SAME) y esta mañana debía realizarse placas radiográficas por un fuerte dolor en el pecho que persiste desde el ataque de ayer.
