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Intimidaciones a periodista que investiga corrupción de la policía salteña

Sebastián Rodríguez es acosado con llamadas de policías de alto rango que quieren intervenir en sus investigaciones y limitarle su difusión

El periodista Sebastián Rodríguez, propietario y editor del quincenario La Voz de Salta, denunció el lunes 21 de septiembre, en la Fiscalía de Causas Policiales de Salta, que está sufriendo una sucesión de actos intimidatorios provenientes, en algunos casos de altos jefes de la Policía de Salta. Rodríguez dijo a FOPEA que la situación se agravó cuando comenzó a develar hechos de corrupción en la Policía de la provincia.

Rodríguez relató que el 20 de agosto pasado viajó a la ciudad de Tartagal con el fin de conseguir un acuerdo para que la revista, que difunde noticias referidas a la seguridad y a procesos judiciales, se distribuya en esa localidad. Con ese fin, se entrevistó con el sargento retirado Eduardo González. Mientras conversaban se presentó un grupo de policías, quienes contaron hechos de corrupción en los que estaban involucrados “altos jefes” de la Unidad Regional de Tartagal.

Cinco días después, ya en la ciudad de Salta, miembros de la Brigada de Investigaciones de la Policía de Salta le informaron que su teléfono estaba intervenido y que lo estaban siguiendo. Rodríguez comunicó la situación a “comisarios de la plana mayor policial”, entre ellos Vicente Cordeiro (jefe de la Brigada de Investigaciones), Rodríguez Sánchez y Néstor Cardozo.

La semana siguiente, lo llamó el comisario retirado, Oscar Tolaba, para interrogarlo sobre la reunión que había tenido con González. Más tarde, lo llamó González para decirle que el presidente de la mutual Centro Policial, Sargento Suárez, le había dicho que estaba al tanto de que la reunión en Tartagal había sido “para hablar en contra de la Jefatura de Policía”, y que no iba a ayudarlo en la distribución del quincenario porque Ormachea le había advertido que el subjefe de Policía, Mario Paz, “lo había apretado” asegurándole que si González distribuía el quincenario, iban a sacarle la delegación del Centro Policial en Tartagal.

Ese mismo día, Rodríguez recibió dos llamados de Mario Paz, en los que el periodista le recriminó que se lo estuviera investigando, a lo que Paz respondió que había comisarios que no lo querían. En los días siguientes Rodríguez recibió otros tres llamados de Paz para informarle de operativos realizados.

En los primeros días de septiembre, el abogado Carlos Humberto Saravia, a quien Rodriguez había visto casualmente en Tartagal, le contó que había recibido un llamado de “una alta fuente de la Policía” que se negó a identificar, para preguntarle si efectivamente había visto a Rodríguez. Además le contó que en la Jefatura de Policía sabían de su viaje a Tartagal y de todo lo que había hecho allí.

Rodríguez declaró en su denuncia que cada vez que entra al edificio de la Jefatura de Policía y se va a entrevistar con algún policía, lo llama a su celular el comisario Mario Paz, que siempre sabe en qué oficina está. También casos en que la persona con la que va a hablar recibe un llamado del comisario.

El 16 de septiembre, luego de que en La Voz de Salta se difundieran los supuestos hechos de corrupción en la Unidad Regional de Tartagal, cerca de las 9pm, un hombre intentó ingresar a la casa de Rodríguez por la parte de atrás. Su intención fue frustrada por una vecina, que lo vio dirigirse a la casa del periodista, con un paquete blanco en la mano. La mujer lo interrogó y el joven respondió que iba a ver a la señora (la esposa de Rodríguez). La vecina le indicó que debía ir por el frente y tocar el timbre, pero el muchacho tomó su bicicleta y se fue. El domingo siguiente, la esposa de Rodríguez recibió un mensaje de texto en el que le advertían que estaban siguiendo a su esposo.

El periodista confiesa que se siente inseguro y considera que no cuenta con garantías para llevar adelante su trabajo periodístico; dado que su situación se agravó luego de la publicación de hechos irregulares que involucran a jefes policiales, entre ellos al propio Mario Paz. Además manifestó que siente temor de que le armen una causa, o que le dejen algo en la casa para involucrarlo en una acción delictiva.

El 22 de septeimbre, Rodríguez presentó un recurso de hábeas data en el Juzgado Federal Nº 1 de la ciudad de Salta, a cargo del juez subrogante Julio Leonardo Bavio, al que le pidió que “arbitre los medios que correspondan a los fines de establecer tanto mi libertad ambulatoria o mi integridad, como la de mi familia, se encuentran amenazadas”.

Acción de Fopea: Investigó el caso

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