Entre el 26 y 29 de enero, el Foro de Periodismo Argentino (Fopea), participó de un encuentro de organizaciones latinoamericanas asociadas a la Red de Intercambio Internacional por la Libertad de Expresion (IFEX), que se llevó a cabo en la ciudad de Antigua (Guatemala). Allí conocieron la situación por la que atraviesan los periodistas de ese país y elaboraron un documento donde exponen su postura.
En ese marco se conocieron las conclusiones de un documento elaborado por el Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (CERIGUA), que señaló que los grupos del narcotráfico y del crimen organizado que operan en ese país se han convertido en la mayor amenaza contra el ejercicio de la libertad de prensa y de expresión.
Además, un grupo de periodistas locales dio su testimonio sobre la difícil situación por la que está atravesando la prensa en ese país, a partir de la presión de los denominados “poderes paralelos”, acusados de asesinato de periodistas, agresiones y amenazas, lo que genera un clima de creciente autocensura como principal mecanismo de protección. Las organizaciones elaboraron un comunicado de prensa en el cual se sintetizan los riesgos del ejercicio de la prensa en Guatemala, y se exhorta al gobierno local a que garantice las condiciones necesarias para el ejercicio de la libertad de expresión y la protección de los periodistas.
Comunicado de prensa
Ciudad de Guatemala, 29 de enero de 2009. Las organizaciones abajo firmantes, participantes de la ‘Reunión regional de las organizaciones latinoamericanas de libertad de expresión’, integrantes y convocadas por la oficina de la red internacional IFEX, manifiestan su preocupación por la deteriorada situación de la libertad de expresión en Guatemala.
En su informe de 2008, el Centro de Reportes Informativos sobre Guatemala (Cerigua) denunció cómo las intimidaciones del narcotráfico y del crimen organizado han postrado la actividad de los periodistas y medios de comunicación en el país. Tres periodistas fueron asesinados el año pasado en circunstancias que la justicia aún no aclara; por lo menos diez periodistas recibieron amenazas de muerte y trece fueron agredidos. Acorralados por este contexto, la prensa optó por la autocensura como principal medida de protección.
Cerigua también se refirió a casos de agresiones contra periodistas cometidas por integrantes de las policías. No obstante, estos registros no reflejan la situación real, ya que la mayoría de las víctimas prefiere permanecer en silencio y no denuncian estos casos. Este miedo generalizado alimenta la impunidad en la que permanecen estos delitos, como ya lo manifestó la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG).
Los participantes del encuentro pudieron confirmar esta información a través de los testimonios de varios periodistas. Éstos relataron la difícil situación de orden público que se vive en las regiones del país, y el miedo generalizado de cubrir hechos violentos. Adicionalmente, manifestaron la falta de compromiso de las autoridades locales para proteger a los periodistas y medios de comunicación. Según la información recogida, las zonas más complicadas son Zacapa, Izabal, Huehuetenango, Alta Verapaz y San Marcos.
Las organizaciones también se reunieron con el Viceministro de Gobernación, Arnoldo Villagrán. El Viceministro afirmó que la inseguridad y la violencia en Guatemala son el resultado del creciente flagelo del narcotráfico y la guerra entre los carteles, sumados a una difícil situación económica. Añadió que el miedo de la población civil se debe también a un problema de percepción, ya que las malas noticias se magnifican y los logros oficiales muchas veces pasan desapercibidos. Por último, manifestó que se está trabajando en el fortalecimiento de las policías parar mejorar la protección de la sociedad civil.
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Los participantes del encuentro exhortan al Estado de Guatemala para que garantice las condiciones necesarias para el ejercicio de la libertad de expresión en el país y la protección de periodistas. Según la Declaración de Principios sobre Libertad de Expresión de la Organización de Estados Americanos (OEA), “la libertad de expresión, en todas sus formas y manifestaciones, es un derecho fundamental e inalienable, inherente a todas las personas. Es, además, un requisito indispensable para la existencia misma de una sociedad democrática”.
Adicionalmente, las organizaciones firmantes le solicitan al gobierno acordar una agenda de trabajo con la sociedad civil que contemple, por lo menos, la implementación de mecanismos de protección para periodistas y medios de comunicación; el impulso de las investigaciones por crímenes contra periodistas, y la formación en derechos humanos de las policías y los funcionarios públicos.
Firmantes
Ivana Patrícia Moreira Ferrari, Asociación Brasileña de Periodismo de
Investigación (ABRAJI), Brasil
Laura Salas, Asociación Mundial de Radios Comunitarias, (AMARC-México)
Brisa Maya, Centro Nacional de Comunicación Social, (CENCOS), México
María Elena González Godínez, Centro de Periodismo y Ética Pública
(CEPET), México
Ileana Alamila y Melissa Vega, Centro de Reportes Informativos sobre
Guatemala, (CERIGUA), Guatemala
Andrés D’Alessandro, Foro de Periodistas Argentino (FOPEA), Argentina
Carlos Cortes, Fundación para la Libertad de Prensa (FLIP), Colombia
Luisa Torrealba, Instituto Prensa y Sociedad (IPYS-Venezuela)
Rachael Kay y Zaynah Khanbhai, Oficina de la Red de Intercambio
Internacional por la Libertad de Expresion (IFEX), Canadá
Hugo Fleitas Dávalos, Sindicato de Periodistas del Paraguay (SPP), Paraguay